Mucho ha llovido desde que en 1801 el matador de toros sevillano Pepe-Hillo inaugurase este precioso coso. Lo hizo una semana antes de que el toro Barbudode la ganadería de José Joaquín Rodríguez acabase con su vida en la plaza de toros de Madrid. El público de la época, así como los empresarios de aquella antigua plaza, tenía muchísimo interés en que fuera el gran Pepe-Hillo el primer diestro que actuase en el coso de Segovia, así que tuvieron que acomodarse a las fechas que tenía disponibles el torero, por lo que la inauguración se llevó a cabo con la plaza sin terminar. La primera corrida se celebró con el espacio que va desde el fin del graderío hasta el muro exterior sin concluir, ahí se puede explicar el mal estado que la plaza presentaba hasta que se reconstruyó en 1996.En esta fecha, un grupo de aficionados decidió unirse para remodelar el coso. Manolo Lozano es hoy empresario de Segovia, junto con Gustavo Postigo, y fue uno de los principales promotores de esta idea: «Nos juntamos unos cuantos entusiastas y sin ningún tipo de ayuda oficial decidimos restaurar la plaza. Tenía mucho que construir, porque era un coso que se inauguró sin terminar, tuvimos que derribar los tendidos y hacerlos nuevos, la hicimos casi de nuevo. Era una plaza incomodísima, con asientos muy estrechos y ahora, podemos decir que es la plaza más cómoda de España. Además, está situada entre la Segovia antigua y la Segovia moderna, por lo que está en un lugar privilegiado«.